MUERTE
DE MI PADRE
Ese
sábado, llamé a Fernando para salir por la tarde con los niños, él tenía ese
fin de semana a su hija, y yo quería separar a los míos, durante unas horas,
del ambiente que teníamos en casa. Dimos
un paseo y pensábamos ir temprano a cenar unas pizzas con ellos, para terminar
a las diez, llevar a nuestros hijos a casa y regresar al hospital antes de las
once de la noche. Esa noche, mientras intentaba que mi padre cenase algo,
murió. Te llamé por teléfono.
Fernando
se había quedado en la entrada del hospital con Carmen, Clara y Javier.Cuando
tú llegaste, dirigiéndote a Fernando le dijiste: “Tengo que contarte algo de tu
amigo Carlos”. Él, por lo que me contó,
te contestó que no le interesaba lo que le dijeras y si creías que eran
momentos para andar con “cotilleos”. Ni tan siquiera subiste a ver a Marino, al
fin y al cabo era tu suegro. Cogiste a los niños y te marchaste sin decir
adiós. Llamé a los servicios funerarios y acompañe a mi padre hasta el
tanatorio. Cuando cerraron regresé andando hasta casa. Los niños ya estaban acostados y tú dormías
en el sofá frente al televisor encendido. Me fui al estudio donde dormía habitualmente
e hice varias llamadas telefónicas a los familiares. Al día siguiente, domingo,
salí de casa temprano, empezaba a amanecer, y caminado despacio regresé al
tanatorio. Recuerdo que era un día despejado y que apuntaba a una temperatura
suave. Por la calle, los corredores de
fondo corrían hacia ninguna parte.
Pasaron pocas personas a despedirse de él, Todos sus amigos les tenía en Benidorm, tú un ratito que aprovechaste para reprocharme que no avisara de la muerte de mi padre a Demi, tu sobrino, que trabajaba en la misma funeraria que se encargó del funeral, para que fuera el que tomase el aviso, ya que así cobraba una comisión. Ya estaba tan harto de tus sugerencias que ni tan siquiera me indignó.
El
lunes le incineramos. Estaba parte de tú familia y algún amigo mío. Me
dejasteis solo en una sala que tenía un gran ventanal desde el que se podía ver
la entrada del ataúd hacia el incinerador. Esperé allí hasta que entró todo el
ataúd en el incinerador y se cerró la puerta. Tú y tu familia esperabais en una
sala previa en la que se habían dejado la corona y los dos ramos de flores. Cuando
salí, tú y tu familia estabais saliendo, habías arrancado las flores de la
corona y de los ramos, caminabais ya por la calle hacia vuestros
coches. Solo tú hermano me ofreció llevarme hasta la ciudad. No acepté, me quedé
allí sentado sobre sobre un pequeño banco y esperé, viendo subir el humo hasta
que las turbinas de la incineradora dejaron de rugir.
Comunicas
la muerte de mi padre a tu abogada. Y como si nada, sigues con tus planes,
elaborando una maraña de acontecimientos que te llevarán a quitarme todo: mis
hijos y sobretodo mi dinero.
Ana R.C
¿Sabemos algo?. Murió el padre de Carlos
28 de febrero
Marisa L.C.
Quedó presentada y hoy
o mañana le dan información de si ellos presentaron algo.
Siento lo del padre de
Carlos
Sábado
Marisa L.C.
Anina, como no
acabamos laconversación decirte que, provablemente, el Juez, sin audiencia
de parte (esdecir, sin audiencia de Carlos) te conceda la custodia
provisional y el uso y disfrute de la vivienda pues eso lo pedíamos en el
primer otrosí en virtud del 102 del C.C. Esta medida no suele ser muy común
pero creo que justificábamos el porqué ha de adoptarse y la razones de su
urgencia.
Sábado
Marisa Losada Castañe
Dios mío se me ha
borrado todo el testamento, no me lo puedo creer
Te decía que no te preocupes por las medidas económicas ya qu de momento
son provisionales y además pedimos que Carlos pague la mitad de la hipoteca,
IBI y comunidad de León aún cuando el piso solicitamos te concedan el uso a
tí. En la demanda, ya veremos si ampliamos la solicitud de alimentos.
Hoy te ví más tranquila y me alegro. Si el Juez va a acordar las medidas del
102 (las otras es una vez se celebre la comparecencia) eso nos veneficiará.
hablamos y recibe un fuerte abrazo
En
estas comunicaciones de Marisa L.C. hay dos aspectos que llaman la
atención. Lo primero, se la borró el testamento. Tú no lo has hecho, yo
tampoco. Solo hay uno, el de mi padre que tú me robaste. Segundo, el juez te concede audiencia a ti y
a mí no, a no ser que mi abogado, por mucho que le insistí, no la pidiera….. Tal vez si le pongo encima de la mesa las
adaptaciones académicas que preparé para mi hija Clara durante su EGB, más de 5
Gigas, más de 2.400 horas y más de 30.000 páginas en Word mientras tú llenabas tu vida de frivolidades,
tanto en el sindicato como en la Universidad donde trabajabas liberada, hubiera
cambiado de opinión. Pero las conversaciones con de Cristina con Avelino
(fiscal de menos de León) habían dado su fruto.
Cuando te pedí que me llevaras hasta el pueblo para depositar las cenizas de mi padre en el lugar donde él quería reposar, te negaste con malas palabras. A mí ni me molestó. Tanto tiempo de acoso, de sufrimiento habían dejado mi alma como un desierto. Solo la presencia de Clara y de Javier me llenaba de ternura. Tú, ya sin mascara, veía la verdadera cara que ocultaba esa frivolidad que reclamabas cuando te conocí.
Cuando te pedí que me llevaras hasta el pueblo para depositar las cenizas de mi padre en el lugar donde él quería reposar, te negaste con malas palabras. A mí ni me molestó. Tanto tiempo de acoso, de sufrimiento habían dejado mi alma como un desierto. Solo la presencia de Clara y de Javier me llenaba de ternura. Tú, ya sin mascara, veía la verdadera cara que ocultaba esa frivolidad que reclamabas cuando te conocí.
Tuve
que esperar hasta este sábado para que un amigo me llevara hasta el pueblo con
las cenizas de mi padre. Alquilamos un coche, recogimos las cenizas en el
depósito del cementerio y las llevamos hasta el pueblo. Era una mañana fría,
con esa neblina suave de los últimos días del invierno. Dejamos sus cenizas en
los dos sitios que él quería, junto a la tumba de su madre y en ese pinar
cercano al pueblo donde él me llevaba caminando despacio cuando me curé de esa
tuberculosis infantil que estuvo a punto de matarme, para que respirara aire
sano e hiciera un poco de ejercicio.
CONTINUA LA
CONSPIRACIÓN.
Durante
esa semana, con las cenizas de Marino en el depósito del cementerio, tú y tu abogada, Marisa Losada Castañe seguías
conspirando, manipulando pruebas, instigando hasta límites ilegales. Recuerdas
ese correo del 5 de Marzo en el que
Marisa te decía: “Me dice mi cuñada que es ella la que tiene que hacer el
informe …. “
De:
|
"Marisa Losada"
<marisalosada@
|
Fecha:
|
Lun, 5 de Marzo de 2012, 12:28 pm
|
Para:
|
ana.robles@
|
Opciones:
|
Me dice mi cuñada que es ella la que tiene que hacer el informe y que en
cuanto se
lo pida el Juzgado que me lo hace y qeu tienes razón que a los cinco años
ya no la
tienen en el archivo. Lo voy a pedir ahora si bien sólo es para testigos
como prueba
anticipada alegando la premura por la fecha. Dice que si le derivaron a
Neuropsiquiatría que entonces sí consta en la Historia Clínica pues
cuando es de
urgencias si no deriva en ingreso o consulta no lo hacen contar pero como
me dices
que sí lo derivaron. bss
|
Hablabais de un informe médico que tenía que pedir (y
pidió) el juez sobre mí. Informe médico que no pasó al expediente o por lo
menos no dieron copia a mi abogado. Esto tiene importancia por los términos en
los que redactaste la demanda, con acusaciones sobre mi equilibrio mental.
También,
el día 6 de marzo, comunicas a Marisa que tú médico estaba dispuesto a
declarar. ¡Qué útil te hubiera sido para alegar tu estado de “maltrato
psicológico”, además no te hubiera costado nada llevarle a los juzgados, sin
embargo, a pesar de su oferta, no le citaste como testigo. Me pregunto porque:
no podías arriesgaste que mi abogado le preguntara por los resultados de los
análisis que te hicieron, donde se reflejaría tu condición de consumidora de
psicotrópicos. Y cualquier lector se
podrá dar cuenta de que tu comportamiento no era “nada normal”.
También
llamaste al Director del Antonio Valbuena (Colegio en el que Clara cursó primaria) para justificar tu
preocupación por ella, para decir que tú
asistías a las reuniones trimestrales de padres y termino diciendo la verdad, que yo estaba cotidianamente en el colegio,
que había sido durante seis años presidente de la Asociación de Padres de
Alumnos y Miembro de Consejo Escolar, que, cuando él era tutor de Clara la
adaptaba todos los temas y que
cotidianamente hablaba con él para desarrollar conjuntamente el curso de
nuestra hija. Mientras tus preocupaciones estaban en otros "temas”.
También
llamaste a la psicóloga de Clara a la que ya no va (pobre Clara y su adaptación
psicosocial) tal vez por lo que te dijo. Tú se lo expresaste CON CLARIDAD EN UN
CORREO A MARISA, ponías textualmente: “La psicóloga prefiere no intervenir
ya que es la terapeuta de los niños y me explicó que, dado que los niños no
hablan mal de su padre, su intervención podía perjudicarme”. Y a una
compañera liberada, cuyo hermano era alcohólico, al igual que tu padre, y que después,
en el juicio, declaró que nunca me había visto ebrio y que siempre había observado un comportamiento correcto y
cariñoso con los niños.
Asunto:
|
Re:
|
De:
|
"Marisa Losada"
<marisalosada@
|
Fecha:
|
Mie, 7 de Marzo de 2012, 11:54 am
|
Para:
|
ana.robles@
|
Opciones:
|
aNA, TANTO A TU HERMANO COMO CHISCO, CAMARERA DE CHISCO, ETC. LO DEJAMOS
PARA QUE COMPAREZCAN VOLUNTARIAMENTE. BESSSSS
----- Original Message -----
From: <
To: Sent: Wednesday, March 07, 2012 9:55 AM
Buen día Marisa, ¿qué tal Carlos?
La psicóloga prefiere no intervenir ya que es la terapeuta de los niños y
me explicó que, dado que los niños no hablan mal de su padre, su
intervención podría perjudicarmen.
El Gerente de la Fundación Carriegos (Terapia Ecuestre), sí
ÁLVARO DE LA PUENTE ROBLES (GERENTE FUD. CARRIEGOS)
Ctra. de Santander, km. 6,5
Robledo de Torío.
Mi compañera de CC.OO. que le ha visto en distintas situaciones bebido y
que conoce el tema porque su hermano acaba de salir de un problema de
alcoholismo.
24007-LEÓN
La psicóloga y trabajadora social de los Equipos de Motóricos,
dependientes de la Dirección Provincial de Educación, no acuden a motus
propio, salvo que sea a través de esta Dirección. La trabajadora social
no
observó que me ninguneara, según me ha dicho. Valora si nos interesa.
Estoy pendiente de si la camarera del bar de Chisco acepta declarar
cuando
le servío wiskis.
Mi hermano Paco, no sé si puede, pero a él llamé "la noche del
terror"
para que viniera a dormir conmigo. Está dispuesto a declarar, pero es mi
hermano.
¿No necesitamos declaraciones de mis jefes relativas a mi estabilidad?
Seguimos en contacto.
Besos
|
Tu abogada había pedido medidas cautelares, lo que suponía el alejamiento del domicilio familiar; dicho de otro modo, que tenía que abandonar el domicilio en el momento que me lo comunicara el juzgado, de hecho tenía que ir a firmar la comunicación al juzgado por la mañana. Los días anteriores, desde que tu abogada te comunicó que lo había registrado la petición de alejamiento, hasta que el juzgado me lo comunico pasó una semana. Esa semana fue la peor semana de mi vida, las vejaciones, los insultos, la manipulación de nuestros hijos, los golpes a la puerta del estudio a media noche, etc. Y en tu demanda ponías que yo tenía doble personalidad y era alcohólico. ¿Crees acaso que si tuviera un trastorno de la personalidad o fuese alcohólico hubieras salido sin ninguna lesión? Sabías que era una persona perfectamente equilibrada y respetuosa, tal vez demasiado, Me consta que cuando has ido difamándome muchas personas no se la han creído. Este escrito se lo van creer, entre otras cosas porque no son palabras comentadas en cualquier situación, sino descripciones con pruebas fehacientes.
El 12 de Marzo tuve que irme de casa. Estabas
como loca, furiosa, con el móvil continuamente en la mano, fuera de ti,
voceabas y gritabas. Encerraste a los niños en su habitación, no me dejaste
despedirme de ellos, a Javier se le caían las lágrimas en silencio. Comenzaste
a vaciar los armarios de mi ropa tirándola en el suelo del pasillo. Cuando cogí
una maleta me dijiste que la dejara y me tiraste dos bolsas de viaje viejas y
con la cremallera rota. Tuve que salir a comprar una maleta y unas cajas de
cartón para llevarla. Cuando regresé estaba en casa el novio de una de tus sobrinas,
antidisturbios de la guardia civil. Ya te vale. Los niños se los habías llevado
a casa una vecina. Recogí mis cosas en
la maleta recién comprada y en cinco
cajas de cartón y me fui a casa de mi amigo Fernando. Cuando saqué una caja con parte de mis
documentos, los importantes ya los habías robado tú, la registraste
meticulosamente protegida por el matón de la Guardia Civil. A pesar de todo, su
presencia me dio cierta tranquilidad. El acoso, los insultos, los empujones,
los desprecios, la arrogancia y
menosprecios de la última semana no te atreviste a manifestarlos en
presencia de tu sobrina y su novio. Le terminé dando las gracias el. Es testigo y cuando lea esto (se lo voy a
mandar) me dará la razón.
A
partir de ese momento no me dejaste volver a ver a mis hijos. El día 19, día
del padre, te pedí que me dejaras a los niños para invitarles a comer en un
restaurante cercano al domicilio, me impusiste tu presencia y a mí no me
importó pero a Javier sí. Recuerdo la cara de la camarera cuando Javier te
dijo: “¡Tu ponte en otra mesa!”. Tuve que ser yo el que le convenciera de que
eras su madre y que no estaría bien que comieras en otro sitio. Después tarde
tres meses en volverles a estar con ellos, hasta que te obligó el juez. En
verles no, porque iba a la salida de los colegios para observarles o estar con
ellos unos instantes, aunque fuera de lejos. Así eres Ana R. C.
A
principio de abril me llamaste por teléfono para pedirme dinero para la
manutención de nuestros hijos y te recordé que mes y medio antes, el 7 de
febrero y el 16 del mismo mes
Habías sacado un
total de 6.500 € de una cuanta común que teníamos en ING, hasta vaciarla. Simplemente
tu estilo.